borat

Hace unas semanas fui a ver la peli Borat (del mismo tipo que hizo Ali G, Sacha Baron Cohen). La cosa es conocida más o menos: Sacha interpreta a Borat, el segundo mejor reportero de Kazajstán (¿se dice Kazajstán o Kazajistán?), que viaja por Estados Unidos recogiendo confesiones bastante comprometedoras. Aunque las principales críticas van dirigidas hacia los estadounidenses (en realidad, gracias a la cámara oculta, se retratan a sí mismos como ultranacionalistas, racistas, homófobos y muchas más cosas), la película no ha gustado nada en Kazajstán.
En parte tienen razón, Borat no tiene modales, es misógino, irreverente, antisemita, antiuzbeko, se morrea con su hermana y en el Kazajstán imaginado de la película los coches son tirados por caballos. No es la mejor imagen para mostrar de un país, pero al menos ha puesto en el mapa a Kazajstán y ha levantado cierto interés por esta parte del mundo.
Y a fin de cuentas, Borat no deja de ser un personaje de ficción. Hay hechos reales que dan una imagen infinitamente peor de Kazajstán que la que puede dar el periodista bigotudo. Para empezar tiene un presidente democrático, Nursultán Nazarbayev que casualmente lleva en el poder desde 1990 (o sea, desde antes de la desintegración de la URSS) y que en las últimas elecciones (2005) consiguió el 91% de los votos. O Nazarbayev es más popular que Rosa de Operación Triunfo (francamente, con esa cara no me lo imagino cantando A tu lado) o algo le pasa a la democracia kazaja. A ello habría que sumar que cada cierto tiempo se producen muertes accidentales de los principales miembros de la oposición.
Nazarbayev tiene el gas y el petróleo que tanto necesita Europa y quiere presidir la OSCE (una de esas organizaciones que parece que no existen y de vez en cuando saltan a la noticia*) en 2009. A Europa no le hace ninguna gracia y no es por culpa de Borat. ¿Será quizás por Vinokurov y los líos del equipo Astaná?


*Curiosamente la OSCE, que vela por la seguridad, los derechos humanos y la democracia en Europa ha criticado todas las elecciones celebradas en Kazajstán desde 1991), así que sería bastante gracioso que nombraran presidente a Nazarbayev.