viernes, 23 de mayo de 2008

conociendo a richard gillespie


La semana pasada conocí a Richard Gillespie. No, no se trata de un centrocampista del Newcastle, ni del cuidador de césped de Prenton Park, sino de un famoso historiador (aunque con la ley en la mano, quizás no sea historiador, sino politólogo) especialista en Argentina (si bien en los últimos años se ha dedicado a estudiar cooperación en el Mediterráneo y el PSOE).
Gillespie fue seguramente el primer autor que trabajó de una manera seria y académica el tema de la izquierda peronista, ese fenómeno tan extraño que sacudió la historia argentina durante los 60 y 70. Asunto que, curiosamente, es también mi tema de investigación, por lo que este señor es una de las razones más importantes por las que estoy ahora en Liverpool y no en Worms o Wuppertal.
La principal obra de Gillespie, Montoneros, soldados de Perón, sigue siendo (y tiene más de 20 años) un referente que siempre se cita, precisamente por ser un trabajo honesto y sincero, fuera del apasionamiento y la parcialidad que suele acarrear el tema. En realidad, casi todos nos basamos en lo expuesto en su tesis doctoral (que ahora estoy leyendo y que tiene un título bastante directo: The peronist left) para explicar la aparición de este fenómeno y de este periodo histórico, corrigiendo y aumentando sus aportes, pero básicamente manteniendo sus esquemas.
Y encima, se trata de una buena persona, que me está ayudando bastante en los laberintos burocráticos ingleses y con quien me vi un poco identificado en cómo empezó su tesis y en cómo se metió en estos líos de la historia argentina. Gillepie fue un día al despacho de su tutor para preguntarle sobre qué tema podía trabajar para su tesis. El profesor, experto en la materia, le encasquetó entonces el tema de Argentina. Richard alegó que no tenía ni idea ni del país ni del idioma, problema que resolvió su flemático tutor regalándole un diccionario de castellano. El caso es que lo aprovechó bien, ya que le permitió estar más de un año en Argentina recogiendo información para su tesis, que terminó unos años más tarde, en 1979.
En el fondo, todos los que intentamos hacer una tesis pasamos por historias y problemas muy parecidas. Yo hace unos años también me compré un diccionario español-argentino.

3 comentarios:

  1. Espero que te ayude y que en el futuro tu tesis también sea referente para otros.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. muchas gracias, pablo.
    aunque sea un aporte mínimo, valdrá la pena intentar hacer la tesis.

    ResponderEliminar
  3. lo estoy leyendo

    me gustaría saber más de él


    saludos desde Buenos Aires

    ResponderEliminar

el blog de chimoeneas ©Template Blogger Green fue creada por Dicas Blogger.

TOPO