remodelando el rico pérez

En las últimas semanas no sólo el Barça ha presentado los proyectos para remodelar y embellecer su estadio. A una escala más pequeña y sin tanto eco mediático, a fines de octubre también se anunciaron los tres diseños que competirán para dar una nueva imagen al estadio del Hércules de Alicante, el Rico Pérez.
La historia de esta remodelación tiene su miga: debido a las deudas con la Seguridad Social, en 1994 el Hércules se vio obligado a vender su estadio al ayuntamiento de la ciudad. El estadio, compartido con el Alicante CF desde que este club ascendiera a Segunda B en 2001, pasó por tanto a ser de propiedad municipal, hasta que en abril de este año 2007 fue recomprado (tras subasta púbilica con un único pujante) por Aligestión Integral (la empresa que controla más del 90% de las acciones del club y que fue creada en 1997 precisamente para tal fin, salvando al Hércules de una delicada situación). El estadio volvía así a manos herculanas, pero la compra entrañaba (aparte del desembolso de nueve millones de euros) la condición de presentar un proyecto de reforma para el Rico Pérez.
Y así es como se llega a esta presentación de estos tres proyectos:

El primero, presentado por el Estudio Lamela, que ya ha diseñado la T4 de Barajas, la última remodelación del Bernabéu y la ciudad deportiva de Valdebebas, tiene como característica principal una torre ("de uso lucrativo") junto al estadio que superaría los cien metros y se convertiría en la más alta de la ciudad (en la idea original, la torre, mediante un código de colores, informaría a todo Alicante del resultado de su equipo). A diferencia de los otros, no proyecta cubrir la totalidad de las localidades (llegaría hasta las tres cuartas partes) y pone su acento en la calidad de los equipamientos y en los palcos.

El segundo, diseñado por Reid Fenwick Asociados (ganador del concurso para el nuevo estadio del Valencia y del Espanyol), comparte con el de Lamela, la idea de construcción de una torre que servirá como hotel; pero a diferencia de éste, el estadio (que no sufriría cambios importantes en la estructura actual de las gradas) estaría dominado por líneas curvas, ovaladas y más suaves, que recuerdan mucho a ese nuevo Mestalla o al Allianz de Munich.

El tercero es el presentado conjuntamente por Subarquitectura y N6 Urbanismo, que aparte de tener un bello proyecto, cuentan con la baza de ser jóvenes y ser de la tierra. Su diseño (sin torres, ofrecen a cambio una plaza pública) se basa en la idea de un diamante que se va puliendo hasta su forma definitiva. Desgraciadamente, su puesta en práctica supondría recortar la curiosa forma de la grada levantada para el Mundial 82, conocida como "grada Tejero" por recordar al tricornio de la Guardia Civil. Conceptualmente fascinante (en sus renders, el estadio formaría la cabeza de Hércules y el parque vecino simbolizaría el laurel de la corona), se le critica de poco preciso en comparación con sus rivales.

Por mi parte, por cabeza me quedo con Fenwick, por corazón con Subarquitectura y por espectacularidad con Lamela; recordando, eso sí, que el estadio más bello de la provincia es el Martínez Valero de Elche, un estadio construido con una sola condición, que tuviera al menos un asiento más que el Rico Pérez.

Fotos: machoherculues.com

PD: Me voy ahora mismo a Cádiz hasta el viernes. Que conste que no es por nada de fútbol, sino por un congreso de historia. Pero, casualidades de la vida, la pensión en la que voy a estar está justo al lado del Carranza. Hasta luego!