cómo ganar un campeonato en ecuador

Los amigos de Café Fútbol están preparando una serie de artículos donde analizan los entresijos de muchas de las ligas del mundo (por ejemplo, la húngara). Para ayudarles y como continuación de una entrada anterior, ahora presentamos algunas claves para entender el maravilloso y nunca bien ponderado campeonato de fútbol ecuatoriano.
Cuenta una leyenda urbana que la liga brasileña cambiaba cada año su intrincado sistema para que la gente estuviera entretenida y no protestara por la larga dictadura en la que vivía (desde 1964 a 1985). Sea o no cierta, es verdad que muchos campeonatos latinoamericanos parecen sumamente complicados a los ojos de los europeos, acostumbrados al prosaico todos contra todos en dos vueltas. En Ecuador la cosa no es tan compleja, pero tiene algunas cosillas particulares.
El fútbol en en este país se puede dividir en tres grandes divisiones: la Serie A, la Serie B y la segunda división, que engloba varios grupos regionales (el país, aunque tiene una extensión similar a la mitad de España está muy dividido geográficamente). La primera división, cuyo nombre oficial es Copa Pilsener Serie A (en honor a una cerveza que entra bien, pero no tanto como la Paulaner) se disputa actualmente y desde 2005 con diez equipos con el sistema de apertura y clausura, pero a diferencia de lo que ocurre en Argentina, existe un campeón último final.
Una vez disputadas las dos vueltas se juega una nueva liguilla de seis equipos en el que se decide el campeón. Y ahí viene un poco de lío. Para ese torneo hexagonal se clasifican los tres primeros de la primera etapa y los tres primeros de la segunda (en caso de repetición se recurre al puntuaje acumulado). No acaba aquí la cosa: dependiendo de la clasificación, se suma una serie de puntos de bonificación: 3, 2, 1 respectivamente para los tres primeros puestos de cada vuelta (sumables: la Liga de Quito, por ejemplo, parte de entrada con cuatro puntos). Y con esos protagonistas y con esos puntos de bonificación comienza el campeonato final, con el sistema de liga a dos vueltas.
Para las competiciones continentales, los dos equipos vencedores de cada vuelta se clasifican para la Copa Sudamericana; mientras que el campeón y el segundo del hexagonal final lo hacen para la Libertadores.
Hasta ahora descendían a la Serie B (también patrocinada por Pilsener) los dos últimos de la clasificación que sumaba los puntos de las dos vueltas, sin embargo, para 2008 ascenderán tres equipos de la segunda categoría a una Serie A que quedará con doce clubes.
Un lío apasionante que ya ha dejado sorpresas: nuestro Deportivo Azogues venció al poderoso Nacional (el equipo con más campeonatos junto con el Barcelona de Guayaquil) en el Atahualpa de Quito.