la otra copa américa

Debo reconocer que he sufrido ciertos síntomas de abstinencia en este primer fin de semana sin liga: ansiedad, aumento de la presión, pérdida de cabello, que ni siquiera la intensa (pero pobre futbolísticamente) final de la Copa de SM El Rey han podido mitigar.
Por suerte, el mundo del fútbol es como la luz solar sobre la Tierra: cuando oscurece sobre Europa, brilla con toda su intensidad en América y así el martes (ya miércoles en España) comenzará en Venezuela la Copa América de fútbol, la competición por naciones más antigua del mundo.
Argentina es favorita porque viene con todo (desde Abbondanzieri a Messi). Brasil es Brasil y por mucho que falten Ronaldinho o Kaká siguen estando Robinho, Dani Alves o el delantero Fred. Y después de los dos grandes, una igualdad tremenda que puede hacer que salga un campeón más inesperado que la Grecia del 2004. Bolivia, Uruguay, Venezuela y Perú no son equipos temibles, pero están encuadrados en el mismo grupo A(irónicamente llamado el grupo de los muertos) y alguno de ellos alcanzará grandes vuelos en la competición. Uruguay tiene la historia (el primero en el palmarés junto a Argentina, con 14 campeonatos) y a jugadores como Forlán; Perú demostró en Madrid que puede ganar a un equipo como Ecuador sin su estella Farfán y Venezuela, que siempre ha sido la cenicienta de Sudamérica cuenta con el apoyo del público (factor únicamente desaprovechado por la España de 1982).
El grupo B, con Brasil, es realmente complicado, ya que cuenta además con el México de Hugo Sánchez, Ecuador (que parece cómoda en el puesto de tercera selección sudamericana) y un Chile en fase de reencontrarse consigo mismo, pero que tiene a Matías Fernández y al goleador Suazo.
Tampoco será fácil saber quién pasará en el grupo C (para facilitar las cosas, además de los segundos se clasificarán también los tres mejores terceros). Ya se dijo que Argentina viene con todo, pero tendrá que medirse a Estados Unidos (la selección invitada, junto a México) que acaba de ganar la Copa de Oro (la competición de la Concacaf), si bien faltarán jugadores importantes como Donovan. O al rocoso Paraguay, que sin ofrecer grandes espectáculos se ha clasificado para los tres últimos Mundiales. O a una Colombia que, como Chile, también busca regresar a su época dorada de principios de los 90.
Como en la otra Copa (del) América, aquí tampoco habrá segundo.


PD: Felicidades al Sevilla por su temporada excepcional. Dentro de unas décadas se recordará a estos jugadores como un equipo de leyenda. Ayer, por casualidad (estaba haciendo de guía turístico improvisado) me encontraba en Madrid y nunca había visto una marea futbolística semejante, con masas de sevillistas (uniformados) en cada plaza, monumento y parada de metro. Muy frustrante estar tan cerca y saber que no puedes ir al partido... (en la foto, yo con unos sevillistas al azar)