lunes, 16 de noviembre de 2009

una tarde tensa en vallecas


Uno nunca sabe dónde va encontrar emociones fuertes y menos que están ocurran en una calle dedicada al payaso Fofó. El otro día charlaba con un amigo argentino sobre lo diferente que se vive el fútbol a uno y otro lado del mundo, de lo tranquilos que son los campos españoles y los malos ratos que se pueden pasar en una cancha argentina. Claro que para todo hay excepciones y hace unas semanas en Madrid, en Vallecas, el ambiente no estaba precisamente para llevar a los niños de picnic.

Hasta algo tan difícilmente comprensible como el mal rollo entre dos equipos como el Rayo y el Elche tiene su explicación: a finales de la temporada pasada, ambos equipos se enfrentaron en un partido en el que los ilicitanos no se jugaban nada, mientras que los de Teresa Rivero luchaban por el ascenso. La cosa acabó 1-2 para un Elche que remontó un gol ¡del portero rival!, con el consecuente enfado de los locales (y su presidenta), que acusaron a los míos de estar primados. En fin, se puede entender la frustración de no conseguir un objetivo tan bonito como la Primera, pero (más allá de que estuviera implicado mi equipo) no comprendo por qué se critica a un club que cumplió con su trabajo (ganar) y menos entiendo que un año después eso sirviera para caldear el ambiente.

El caso es que estaba yo hablando en la puerta del estadio con unos amigos ilicitanos recién conocidos (que tuvieron a bien regalarme una entrada), cuando llegó el autobús de los ultras del Elche y de repente me encontré muy cerca de una escaramuza entre los radicales vallecanos y la policía, varias botellas de vidrio volando mediante. Protegidos por la policía (vaya ironía), los ultras franjiverdes, lejos de calmar la situación, se puso a calentar a sus rivales... con el resultado de que los aficionados del Elche (íbamos todos juntos, los exaltados y los tranquilos) tuvimos que entrar al estadio escoltados con el partido ya empezado.
Para que la cosa no fuera más allá de lo verbal, a los ilicitanos nos pusieron en un sector alejado del estadio, separados por una fila de policías. Pero, teniendo en cuenta que no me gusta que me confundan con esa gente que sólo se ocupa de manchar el nombre de mi ciudad, me fui de allí y me mezclé entre la gente de Vallecas, donde ya no hubo más problema (salvo la incertidumbre del resultado). Por supuesto, estoy totalmente a favor que radicales de uno y otro lado se destrocen las costillas a patadas mutuamente si es lo que les pone, pero sería un detalle que lo hicieran sin involucrar, como fue el caso, a gente acompañada con niños pequeños.

Por lo demás, todo fue genial en la que es (mucho más que el Calderón) la cancha más argentina de España (el parecido con La Paternal de Argentinos Juniors es preocupante). El Elche de Bordalás jugó un partido muy serio, presionando la salida del Rayo, con un Acciari en plan mariscal, un Wakaso ejerciendo de mediocentro africano (¿será la revelación del año?) y un golazo de Juli que dejó las cosas en 0-1. Y encima me compré una mochila del Liverpool. (Y por si no os creeis que me lo pasé bien: he aquí la prueba).

3 comentarios:

  1. No mientas, Chimo, seguro que ibas provocando con una camiseta del Elche (una señal que, para un primate descerebrado o ultra futbolero, es suficiente para ir a hacerte pupita).

    PD: ese LOL en Madrid no mola tanto como el de Hervás.

    ResponderEliminar
  2. Como habéis resucitado con Bordalás, ya empiezo a comprender ese triunfo en Vallecas contigo en las gradas, deberías ser el fichaje para los partidos de fuera de casa pero por Huesca ni se te ocurra aparecer.

    ResponderEliminar
  3. la verdad es que es increíble el cambio que hemos dado con bordalás, que sigue invicto tras ganar al betis sin problemas. espero escribir pronto del tema!

    ResponderEliminar

el blog de chimoeneas ©Template Blogger Green fue creada por Dicas Blogger.

TOPO