martes, 24 de junio de 2008

el fin de una etapa


El día 15 fue un día normal. Tan normal que ni recuerdo ahora qué partido de la Eurocopa se jugó aquel día. No hubo cataclismos, ni se rasgó el velo del templo de arriba a abajo, ni siquiera fue el día señalado para que coronara el Tourmalet, Pero aunque no pasara nada extraordinario, en cierta manera, supuso el final de una etapa de mi vida.
El día 15 se acabó la beca que (por su cuenta y riesgo) me concedió la Junta de Castilla y León para mis estudios de doctorado. Desgraciadamente no he podido cumplir el objetivo último del trato, que era acabar la tesis, pero los contribuyentes castellanoleoneses pueden tener la conciencia medio tranquila porque la cosa está encaminada y ya pueden disfrutar de alguna tesina (además, han financiado algún partido de fútbol barato en Zamora o en Garrido).
En lo personal han sido unos bonitos cuatro años. En el fondo, he aprendido muchas cosas sobre Argentina (un país que no entienden ni los argentinos), sobre cómo funciona la Universidad (una empresa, pero de buen corazón) y sobre la vida en general (el Fairy quita las manchas mejor que los productos baratos). He podido viajar por medio mundo (también a Moratalla) en busca de viejas revistas y extrañas conversaciones y me dieron una sala (compartida con otros buenos amigos) para poder estudiar tranquilo y pasar buenos momentos. Pero sobre todo, lo más importante es que he conocido a gente la mar de agradable que me ha alegrado el día a día (especialmente los viernes por la tarde, jugando al Fifa y escuchando a RBD). Como siempre ocurre, a uno le gustaría empezar ahora de nuevo, con todo lo que he aprendido; pero obviamente, como también siempre ocurre, no habría aprendido nada sin ese pasaje de cuatro años.
Y ahora que por fin estoy libre en el mercado laboral (la beca tenía una clásula de exclusividad), puedo decir: ¡Empresarios del mundo, en mí podéis encontrar mano de obra cualificada y de bajo costo!. Eso sí, no sé arreglar pinchazos de bicicletas...

4 comentarios:

  1. Muchachada Nuit, ahi teneis vuestro experto en futbol :-)

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  2. ¡Qué miedo! Parece algo realmente trágico, ¿desaparece un ente?, ¿muere un alma?, ¿llegan cataclismos?. Oh, aqueos de hermosas grebas, ofrezcamos una bella hecatombe de grasa quemada al buen Zeus (al perro de Mónica, me refiero, claro), con el fin de aplacar su ira y de que guíe a Chimoeneas de vuelta a su lar, donde todo es calmo y solariego.
    Mu bieeeee.
    ¿Esto no era un blog de fungol?
    Queremos fútbol, queremos fútbol.

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  3. Bienvenido al mundo laboral, es una mierda pero te acabas acostumbrado.

    ¡QUE BIEN SE VIVÍA EN LA UNIVERSIDAD!

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  4. oh, "anónimo", realizad hecatombes en honor del gran dios eolo, para que aplaque su furia y mi regreso sea lo más calmo posible.
    y esto es como "noche de fiesta", un espacio de variedades, pa hartarte de funbol, visita cincotresdos.blogspot.com

    y bueno, en realidad sigo estudiando y en la universidad, sólo que ahora no me pagan por hacerlo...

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